Artículo Localeando, 14 de Mayo de 2009
Jaime Villasana Dávila
Días atrás el CIDE (Centro de Investigación y Docencias Económicas) dio a conocer los resultados de la encuesta “México, las Américas y el Mundo 2008”. Este es un interesante ejercicio ya realizado en 2004 y 2006.
Una primera reflexión que hace el CIDE es que “el nacionalismo mexicano está vigente pero en clara transformación”. Afirma que los elementos simbólicos del nacionalismo mexicano (orgullo nacional y petróleo) se mantienen pero el localismo resurge en todo el país, siendo la tendencia menos perceptible en el centro, lo cual es natural porque de ahí son símbolos mexicanos importantes como el mariachi.
El cambio más notable, dice el CIDE, es que en ambas fronteras del país la identidad local ha crecido. Tal como se reportó en las ediciones pasadas, el sur mantiene características diferentes a las del resto del país. En 2006 la identidad regional en los estados del sur era un 10% más fuerte que la identificación con la nación (55% frente a 45%), en 2008 la distancia entre ambas se ha duplicado (64% frente a 35%), una diferencia de 24 puntos por debajo del promedio nacional. ¿Se sienten los sureños desatendidos?.
La novedad es que, comenta el CIDE, los norteños también se están moviendo en el mismo sentido hacia un claro fortalecimiento del regionalismo. El porcentaje de personas del norte cuya identidad primaria es la de su estado aumentó en forma constante de 2004 (27%) a 2006 (30%) y a 2008 (42%). Si bien en el norte la identidad nacional sigue siendo mayoritaria frente a la local, hubo un descenso de 11 puntos en el número de norteños que se sienten primordialmente mexicanos (de 68% en 2006 a 57%). ¿Se desesperan los norteños?.
Si consideramos a todos los mexicanos (sin regiones), el sentimiento de identidad local también aumenta en 10 puntos, pasando del 30% al 40% en tanto que la identidad nacional cae del 64% al 59%.
En síntesis, dice el CIDE, “hay elementos para pensar que las brechas regionales se están profundizando rápidamente” y añade “México se ha vuelto un país más heterogéneo y diverso en el que las matrias avanzan como espacio de identificación en detrimento de la patria”.
¿La conclusión? La matria se fortalece y la patria se debilita ¿Cuáles son los factores de esto? Pudieran ser muchos, pero la debilidad del Estado mexicano y las actitudes de la clase política nacional hacen que muchos mexicanos volteen a su región/estado para encontrar las respuestas que su país no les puede brindar. Lo sorprendente es que todavía no haya un partido o un líder que explote tales sentimientos pero sólo es cuestión de tiempo.
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