Artículo Localeando,
22 de Noviembre de 2012
Jaime Villasana Dávila
El caso Moreira-deuda es interesante desde cualquier perspectiva que se
le analice; académica, ciudadana, política, gubernamental, administrativa, legal
y ética. Brinda muchos elementos para el análisis y el aprendizaje. Aquí
algunos.
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Su estrategia de que fue engañado no es suficiente. Siguen faltando explicaciones. Fuente: Red Noticias. |
1. Humberto Moreira es un politico como
pocos en este país. Su carácter personal lo impulsa a no parar hasta conseguir sus
objetivos aún y cuando algunos son inalcanzables. El primer aprendizaje es la
clásica frase del escritor Jonathan Kozol; "Elige batallas lo suficientemente
grandes como para que sean importantes, y lo suficientemente pequeñas como para
ganarlas". Moreira en el tema de la deuda las ha elegido erróneas y las ha
enfrentado peor pero en política nada es para siempre y ahí está su triunfo
jurídico con resolución de la PGR.
2. Hay varios ex -gobernadores cuestionados por
el monto de deuda que contrajeron pero no por el “cómo”, caso de Moreira, quien
sigue sin responder la pregunta clave ¿cómo pasó la deuda coahuilense de mi1
500 millones aprox. en 2009 a 36 mil 500 en 2011?.
3. Al inicio Moreira aplicó una mala
estrategia de defensa. Ante una monumental deuda no puedes salir a defenderte
en partes y además mal preparado. Moreira pensó que saliendo en medios cargando con su informe de gobierno más su habilidad y carisma política lo iban a sacar
del problema. Al contrario, lo hundió más pues nunca explicó el “cómo”. En
casos tan graves como estos la regla dice; pide tiempo y calla, reagrupate,
arma una estrategia sólida y ejecútala y si hay que pedir disculpas públicas entonces
hazlo y ante todos. Le ganaron las ansías por ser parte del gabinete de EPN.
4. En los últimos días Moreira ha
regresado a medios para retomar su defensa y ésta en todo su derecho. Se nota
incluso una mejor estrategia. El martes pasado con Ciro Gómez Leyva (Milenio) mostró
un listado detallado de obras e inversiones (falta analizarlas) realizadas en
su sexenio. Esto debió haberlo hecho hace meses. También anunció su ofensiva legal por “daño moral”. Pero sigue cometiendo algunos mismos errores. Su
mensaje, datos y el “cómo” de la deuda son todavía confusos. Además en lugar de
citar a medios a una rueda de prensa lo hace con aquellos de su elección. Su
mensaje no sólo es confuso sino que lo limita en audiencia y da pauta a que sea
alterado.
5. Un buen gobernante siempre debe
hacerse responsable al menos políticamente de los aciertos y errores de su
equipo. Moreira sigue sin aceptar la responsabilidad que le toca (volvió a negarla con Aristegui) y eso sigue enojando a la gente. La madurez y humildad
son características que hasta ahora le han faltado.
Esta historia no se ha acabado.
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