Artículo Más Información, 23 de octubre
de 2023
LOCALEANDO - Jaime Villasana Dávila
En medio de la batalla política, jurídica y mediática contra el Poder Judicial, AMLO tomó varias decisiones en la semana y de las cuales destaco dos.
La buena es que realizó ayer domingo con presidentes y representantes de
varios gobiernos latinoamericanos y del caribe la reunión “Encuentro por una
vecindad fraterna y con bienestar”. El tema central fue definir estrategias
para detener los enormes flujos migratorios de tales países hacia México y que
tienen desbordadas a ciudades y pueblos de la frontera sur y norte.
Los países que más expulsan migrantes son Cuba, Venezuela y Nicaragua, a cuyos gobiernos AMLO no los quiere criticar ni con el pétalo de una rosa. Los defiende a capa y espada en instancias internacionales y son los que más problemas le generan. Lo hace solo con la finalidad de usarlos como moneda de cambio ante EE.UU. y para fastidiar a los conservadores en México.
Como suele suceder en este tipo de reuniones de líderes latinoamericanos, se hablará mucho y al final se actuará poco. Ni AMLO los podrá convencer de hacer algo porque simplemente no conviene a tales países detener a sus ciudadanos que se quieren ir; no tienen con qué mantenerlos y mejor que causen problemas en otro lado, es decir, en México.
Lo único que quedará por hacer a AMLO es seguir aplicando mano dura en las fronteras con la Guardia Nacional y tratar de administrar el problema hasta el final de su sexenio, que está a la vuelta de la esquina.
Esta reunión convocada por AMLO llega demasiado tarde, pero al menos algo está intentando y esa es la buena noticia, en este caso en migración.
La pésima noticia tuvo que ver con la aprobación de la mayoría de los diputados de MORENA en la Cámara de Diputados (es decir AMLO) de lo siguiente, según el analista político Juan Ortiz y a quien le recomiendo lo siga en la plataforma X (antes Twitter): a) Un nuevo fideicomiso turístico operado por SEDENA que recibe 10 mil millones de pesos al año; b) Dos nuevos fideicomisos operados por SEDENA y Marina.
Para alimentar de dinero a tales fideicomisos aprobaron también un impuesto del 9% a concesionarios de aeropuertos. Esto significa que el Tren Maya, la aerolínea del Bienestar (Mexicana) y otros aeropuertos operados por los militares contarán con ingresos permanentes ¡desde antes de operar! Y luego que así sea.
Esto es una clara invitación para que directivos y empleados de tales empresas del gobierno hagan absolutamente nada para hacerlas productivas ¿para que preocuparse de vender boletos o ser eficientes si los ingresos de todas maneras van a llegar?.
Es el clásico ejemplo de cuando el padre le hereda todos sus negocios al hijo sin haberlo educado para administrarlos bien.
De una vez que se vaya preparando la o el próximo presidente de México para rescatar a tales empresas, tal como sucede hoy con PEMEX. Ni esos fideicomisos podrán rescatarlas de la bancarrota. No hay impuesto o fideicomiso que alcance cuando hay un mala administración. Ojalá me equivoque.
Glosa: Hace dos semanas AMLO obligó a los concesionarios de aeropuertos a bajar la Tarifa por Uso de Aeropuerto (TUA) que se cobra a los usuarios de estos. Esta fue una buena decisión de su gobierno, pues el TUA en México es de los más caros en el mundo. Pero (con AMLO casi siempre hay un pero), es la forma en que lo hizo; sin decir “agua va” y ello generó más desconfianza en ciertos ámbitos del sector privado. Una pena que AMLO haga algunas cosas buenas, pero que parecen malas.
www.localeando.com Twitter: @jvillasanad
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