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publicado en Más Información, 21 de mayo de 2024
LOCALEANDO - Jaime Villasana Dávila
Todo mundo sabe que México está en una encrucijada. Ya cansa decirlo y escucharlo pero no podemos ignorarlo. Sus electores deberán tomar el próximo dos de Junio uno de los dos caminos existentes; el ofrecido por Sheinbaum o el de Xóchitl.
Ya mucho se ha escrito sobre lo que
representan cada una. Naturalmente cada bando señala ser la mejor opción y ya tú
elegirás el que mejor te parezca. Para abonar a tu análisis y reflexión
personal sobre por quién votar, quiero presentarte lo que ambas opciones han
significado para la democracia mexicana a partir del 2000, año de inicio de la
alternancia. Comenzaré con la alianza opositora PRI-PAN-PRD que representa
Xóchitl.
Del 2000 al 2018 el PRI-PAN ejercieron un gobierno federal que dejó mucho que desear, principalmente en el ámbito de la corrupción. Los dos gobiernos del PAN (Fox y Calderón) no pudieron llevar a México al siguiente nivel al tener una gestión de gobierno regular, un combate a la corrupción que le faltó punch y unas reformas estructurales que simplemente no pudieron conseguir por varias razones. Hubo ciertamente logros como la creación y puesta en marcha del marco legal y estructura de la transparencia y rendición de cuentas, una pieza clave en toda democracia. Esto se obtuvo en coordinación con la sociedad civil.
El caso del gobierno del PRI con Peña Nieto todo pintaba prometedor con la firma del Pacto por México el cual sí incluía cambios estructurales al ejercicio del gobierno en educación, salud, electricidad y petróleo. Para ello entraron en función órganos autónomos y se le daba participación al sector privado dado que el gobierno no puede solo (ni aquí, ni en China).
Sin embargo, el PRI volvió a caer en su vicio: la corrupción. Esto dañó severamente todo lo logrado. Fue una verdadera tragedia y, aunque trató de recomponer metiendo a la cárcel a varios servidores públicos y gobernadores corruptos, todo fue demasiado tarde.
Ahora bien, ni el PAN y ni el PRI trataron de herir de muerte a la democracia con una cuchillada o un balazo directo a sus órganos vitales. Esto mediante una reforma al INE que eliminase su imparcialidad o una reforma al Poder Judicial para apropiarse descaradamente de él. Ciertamente trataron y colocaron en ellos a personajes afines, como en cualquier democracia se hace, pero cuidando las formas y respetando la ley.
Cierto, el golpe que le daban a la democracia existía, pero era de baja intensidad con algunas decisiones o negligencias que la iban dañando poco a poco. Este tipo de golpes la sociedad podía combatirlas y hubo muchas batallas que ganó. Por ejemplo, la creación del Sistema Nacional Anticorrupción. Su operación estuvo lejos de ser la correcta (el gobierno se resistía), pero ahí estaba y daba signos de mejora.
Insisto en que PRI y PAN golpeaban a la democracia pero era “de poco a poco” y la sociedad podía contraatacar a través de sus diversos sectores. No había necesidad de marchas nacionales o mareas rosas.
Pasemos a MORENA luego del 2018. Desde el 2006 y hasta la campaña del 2018 AMLO siempre dijo que quería cambiar al gobierno para hacerlo más cercano a la gente y más democrático, así como combatir la corrupción. Sin embargo, nunca puntualizo que tipo serían esos cambios y como los iba a hacer. La gente harta del PRI y PAN confió en él y le dio un cheque en blanco en 2018.
Y una vez en el poder AMLO fue desvelando sus verdaderas intenciones. El primer arranque autoritario se dio con la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México mediante un proceso que en ninguna democracia seria se daría y menos con una consulta “patitio”.
Hubo otros múltiples ataques a la democracia a través de sus instituciones como la eliminación del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), aunque por mucho los más directos y arteros son contra el INE y el Poder Judicial. Al primero lo quiere hacer un órgano adscrito al gobierno (al presidente) tal como sucedió en el viejo régimen priísta y al segundo lo quiere hacer un órgano total y descaradamente controlado del presidente.
Las pruebas de lo anterior sobran. Para el caso del INE ahí está su propuesta de reforma electoral y para el Poder Judicial ahí está el nombramiento de Lenia Batres, integrante de MORENA y sin carrera judicial como miembro de la Suprema Corte, sin olvidar a Jazmín Esquivel quien plagió sus títulos de educación superior y que cualquier persona con poca integridad ya hubiese renunciado, como lo hizo Fausto Alzati, primer Secretario de Educación en el sexenio de Zedillo.
Para puntualizar; AMLO, Sheinbaum y MORENA hacen ataques directos y mortales para controlar y someter a dos instituciones centrales para mantener viva una democracia en cualquier país, tal como se ha hecho en otros países que hoy son de tipo autoritario. Es un régimen que no se detiene ni siquiera ante masivas manifestaciones y a cuyos participantes los tacha de traidores a la patria. Y no olvidemos el desastre de desempeño que ha tenido; está reprobado en todos los servicios públicos (seguridad, salud, educación, etc.).
Tenemos entonces dos caminos muy claros y ninguno es perfecto, aunque sí uno es destructor rápido de la democracia y es el de la 4T. La otra opción históricamente ha dañado la democracia pero nunca con golpes mortales y se les ha detenido a tiempo.
Si esto no lo quieres ver porque Sheinbaum dice que no será tan radical como AMLO, entonces te estás autoengañando. AMLO dijo lo mismo y mira donde nos tiene. ¿Te preocupa los programas sociales y las transferencias a tu cuenta bancaria? Eso no se puede eliminar ya, pues generaría muchísimo malestar. Solo un populista o dictador lo haría y claramente Xóchitl no lo es.
La decisión es tuya ¿cuál camino tomarás? ¿el de Sheinbaum-4T que busca asestarle golpes mortales a la democracia y no podremos-no podrás controlarlos dado que no escuchan y menos corrigen o el de Xóchitl-PRI-PAN-PRD, quienes también le dan golpes pero de baja intensidad y que como sociedad los hemos podido contener y les hemos hecho corregir?
Glosa: La marcha de ayer domingo fue
todo un éxito para quienes desean un cambio de gobierno. Y aunque Xóchitl no
fue perfecta en el tercer debate, si pudo asestar buenos golpes a Sheinbaum,
cuyo desempeño fue en realidad una actuación para TV. Ese tono de voz y
movimiento corporal no son propios de ella. Compáralo con sus mítines
disponibles en YouTube y te darás cuenta. Actúan en campaña, en el poder son
otros; “dale el poder a una persona y entonces la conocerás” (proverbio Chino).
www.localeando.com X: @jvillasanad
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