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publicado en Más Información, 3 de junio de 2024
LOCALEANDO - Jaime Villasana Dávila
Tenemos nueva realidad política en México y por ello, a continuación, planteo breves reflexiones en temas que van desde la democracia y hasta el regionalismo, pasando por el INE y Coahuila, mi estado natal.
OPOSICIÓN. Demasiados errores cometidos del
PRI, PAN y PRD, iniciando con no aceptar lo que son; partidos decadentes. Una
mayoría de electores no quiso tragar sapos aun con la democracia en riesgo y
votó por MORENA. De entrada jamás pidieron perdón por los errores cometidos en
el pasado. Siguieron rescatando personajes impresentables y los mismos Alito
Moreno y Marko Cortes son ejemplo de ello. Alito y Cortés deben renunciar hoy
mismo. Millones les votamos en esta elección dado que eran el único salvoconducto
para mantener viva la democracia en México. Hoy ya no lo son. PRI y PAN deberán
refundarse si quieren sobrevivir. Y no, el PAN no podrá escudarse en que fue el
segundo partido más votado con 17% (MORENA tuvo 45%). Hacerlo es seguir en
picada. El PRI deberá refundarse cambiando hasta de nombre. Al menos que con su
10% quiera mantenerse como partido de la “chiquillada”, pero este segmento ya
está muy peleado con el Verde y PT. MC obtuvo el 11% y tampoco está para echar
campanas al vuelo. Por su parte, el PRD ya es historia. Hoy en día la oposición
es demasiado débil aunque unida con su 35% de votos puede hacer ruido. La
oposición más fuerte está dentro de MORENA (los moderados).
SHIENBAUM. Dado los números con los cuales ganó, es sin duda la nueva líder de MORENA, aunque buena parte de tales números se los debe a AMLO. Ahora bien, como en democracia hay que saber perder y también ganar, de mi parte le deseo el mejor de los éxitos a la nueva presidenta de México. Desearle lo contrario es darse un balazo en el pie. Hay que exigirle resultados que su movimiento dijo entregaría en el primer sexenio y no lo hizo justificándose en las instituciones que ahora va a destruir. Ojalá tire a la basura el discurso radical, ofensivo y polarizante de su mentor. No creo ello suceda. Espero equivocarme. La historia lo dice; el exceso de poder nunca conlleva a un final feliz y eso le pasará a México, lamentablemente. Con populismo ahora vives feliz, mañana no.
MORENA. Es un claro triunfo de MORENA obviamente, pero de los duros de ese partido. Sheinbaum, de los moderados, tendrá que cederles terreno en ciertos temas para no dividir al partido. MORENA no es un partido democrático y menos lo son sus líderes. Impondrán su agenda en todo y esta no va por el camino de la democracia liberal. La democracia en México está herida gravemente.
AMLO. Se salió con la suya, violando leyes, inundando de efectivo a los electores y ejecutando una elección de Estado con actitudes autoritarias. Lo único bueno de todo es que ya pronto se va, pero tiene septiembre para todavía hacerle más daño a la democracia mexicana vía el Congreso mayoritario de MORENA. Hay que reconocerlo; AMLO supo leer la mente de la mayoría de los mexicanos para darles lo que quiere; beneficios aquí y ahora envueltos en un discurso polarizante y antidemocrático. A la mayoría de las/los mexicanos les gustan los caudillos y personas fuertes. AMLO es eso y algo más.
CIUDADANÍA. De 1920 a 1997 tuvo que luchar contra viento y marea para hacerse de un país democrático y de libertades. Lo logró aunque no lo disfrutó en buena medida por los abusos de los partidos tradicionales. Decidió regresar al partido hegemónico semi autoritario a partir de 2018 y lo refrendó en 2024. Ahora mismo está de fiesta una mayoría ciudadana, pero no pasará mucho tiempo para que tenga que volver a iniciar una larga lucha por recuperar lo que alguna vez tuvo. Y es que MORENA no se va a ir tan fácil. La elección de estado en 2024 es una muestra.
CONGRESO Y SENADO. Sheinbaum, MORENA y aliados lograron la super mayoría necesaria para modificar la Constitución, así que agárrese que se vienen cambios profundos y, tal como lo anunciaron, no están en línea con la democracia sino en la consolidación de un partido hegemónico con partidos satélites. Bienvenida/o a los 70s y hacia atrás, cuando el PRI y satélites gobernaron por 70 años. Congreso y Senado serán todavía más de papel.
INE. El otro gran perdedor de esta elección federal y estatales, adicional a los partidos de oposición, fue el INE de Guadalupe Taddei, presidenta colocada en el cargo por la mayoría de MORENA. Tendrá que responder muchas preguntas por su pésimo desempeño en el proceso y jornada electoral y luego realizar un enorme esfuerzo para recuperar glorias pasadas, aunque esto realmente ya no importa mucho. Sheinbaum lo desaparecerá y mandará a la Secretaría de Gobernación, según su Plan C. Solamente amplias manifestaciones sociales podrán impedir la desaparición del INE.
MEDIOS DE COMUNICACIÓN. Una buena parte de los medios de comunicación tradicional se habían rendido antes de la elección. Son el caso de Milenio, El Heraldo de México, El Financiero y Reforma. El día de la elección entregó la plaza Televisa. Veremos que tanto pueden sobrevivir Latinus, Animal Político, Aristegui Noticias y otros similares. Habrá que apoyarles para que sigan siendo independientes. Sin ellos la democracia está mucho más en riesgo.
DEMOCRACIA. Enfrenta un reto enorme en el mundo y México no es la excepción. A la gente le importan beneficios aquí y ahora y no que forma de gobierno se los entrega. La democracia y los demócratas deberán endurecer posturas para entregar satisfactores, pero sin caer en el populismo. Es un riesgo, pero deberá jugársela. La lucha para arrebatarle a los populistas la mente y corazones de los votantes es larga, sangrienta y salvaje.
DEMÓCRATAS. No hay que rendirse. Ahora más que nunca son necesarios. La división de poderes, un Poder Judicial autónomo y profesional, transparencia y rendición de cuentas y otros valores similares, son lo único que ha dado libertad y progreso a una sociedad/país. Hay que curar heridas, reflexionar mucho, decidir y ejecutar.
FEDELISMO Y CENTRALISMO: El federalismo tuvo algunos triunfos ante el centralismo de 1994 al 2018 con la obtención de facultades y fondos federales. Pero a partir de este año el centralismo regresó con MORENA y así seguirá por otros seis años o más. Los estados seguirán sometidos financiera y políticamente al poder presidencial. Esta ruta centralista sólo seguirá causando más disparidad regional y esto llevará a más problemas. El gobierno federal por sí solo no puede revertirlo y ello ya quedó confirmado.
MUNICIPIO. El municipio fue olvidado y perjudicado en el sexenio de AMLO (ejemplo, eliminación del FORTASEG -fondo para la seguridad-) y no hay razón para que sea diferente en el sexenio de Sheinbaum. Las horas bajas y oscuras del municipalismo en México seguirán al menos otros seis años. Y lo será todavía más si los municipalistas no se organizan y alzan la voz.
REGIONALISMO. Se va a radicalizar en ciertos sectores sociales y en ciertos estados, principalmente en Coahuila y Nuevo León, en los cuales la oposición tuvo buen desempeño. El resultado electoral lo confirma; la elección federal es para MORENA y las elecciones locales en ambos estados es para la oposición. Partidos políticos estatales con una agenda regionalista seguirán ausentes. Los existentes apelan a la unidad nacional o colocan primero al país que al estado. Hay tierra fértil para crear un partido estatal de perfil regionalista en los estados primero citados, así como en Yucatán. En todos ellos la identidad local está muy arraigada derivado de acontecimientos históricos. Un partido estatal regionalista difícilmente ganará el poder, aunque sí podrá abrir procesos políticos no vividos en México desde el siglo XIX pero sí muy presentes hoy en día en muchos países del mundo. El futuro es de las identidades geográficas.
COAHUILA. En mi estado natal la elección federal
(presidencia, senadores y diputados) MORENA la ganó contundentemente. Sin
embargo, en las elecciones para Ayuntamientos el PRI arrasó con 29 de 38. En
otras palabras, el elector coahuilense es bipolar. Es un fenómeno que debe ser
estudiado a fondo. De los políticos coahuilenses, quien destaca, es Jericó
Abramo, uno de los pocos candidatos priístas de la alianza que pudo ganar en el
país. Ganó el distrito 4, ciertamente algo favorable a la alianza por el perfil
del electorado pero triunfo al fin. Iremos viendo cual rol decide jugar al
interior del PRI-Coahuila y PRI-Nacional. El PRI está herido muy gravemente en
todo el país excepto en Coahuila, aunque ya hay señales de un electorado
cansado. Debe encontrar dos o máximo tres nichos de batalla política. Apelar a
la identidad coahuilense debe ser uno de ellos. Por otra parte, MORENA se
afianza en el estado. Muy probable que en siguiente elección estatal MORENA se
haga del poder, si es que el PRI-Coahuila no ajusta estrategia.
GOBIERNO DE COAHUILA. Debe iniciar ya negociaciones para salirse del pacto fiscal, lo cual le será negado de manera contundente aunque ello sentará precedente. Es un paso de muchísimo riesgo, dado que es posible que los coahuilenses no lo apoyen. Más cuando votaron en lo federal por MORENA. Pero debe hacerse. México y sus estados necesitan de un Big Bang federal pues la ruta actual lo está condenando a más polarización regional con consecuencias conocidas como la balcanización. Coahuila puede detonar dicho Bing Bang, pero tendrá que hacerlo solo. El gobernador tendrá que decidir si se convierte en un gobernador sometido a Sheinbaum o un gobernador que defiende los intereses del estado sin someterse. Todo un reto.
PARA CONCLUIR. En su discurso de victoria Sheinbaum se oyó mesurada y agradeció la llamada de Xóchitl Gálvez, demostrando esta última su buena persona. Pero ¿Qué Sheinbaum vamos a ver ya como presidenta; la de los 70s o la que realmente quiere poner a México en mejores condiciones sociales y democráticas? Mi impresión es lo primero y, en este sentido, se vienen tiempos difíciles para el país. La democracia mexicana sigue en picada y a una mayoría de sus habitantes eso no les interesa. Veremos si, cuando el agua les llegue a cuello, reaccionarán. La historia dice que sí, pero significará el haber desperdiciado (otra vez) quizá décadas.
Por los próximos seis años Sheinbaum, ella y solo ella, decidirá si México termina por abrazar al populismo y al autoritarismo o mantiene a México como una democracia liberal. Y no, mantener la autonomía del Banco de México no significa ser democrático. En Rusia el Banco Central es autónomo y Putin es un autoritario. En cambio en Japón (viví ahí 4.5 años), desde finales de la II Guerra Mundial ha gobernado casi ininterrumpidamente el mismo partido, pero ha respetado todos los principios y reglas democráticas. La casi nula alternancia está en la pésima oposición y en los buenos resultados que entrega el partido gobernante. ¿Qué tipo de México nos entregará Sheinbaum; uno de estilo Rusia, China, Venezuela y Nicaragua o uno de estilo Japón? Mi impresión es a los primeros. Ya lo intentaron de 2018 a 2024 y con este triunfo holgado lo seguirán intentando y lo lograrán. Todos los síntomas y señales están ahí. Ojalá me equivoque.
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