El activismo internacional de Coahuila ¿hasta dónde llegará?
Artículo
publicado en Más Información, 23 de septiembre de 2024
LOCALEANDO - Jaime Villasana Dávila
El pasado 9 de Septiembre el gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, recibió al Embajador de España en Saltillo para aterrizar una agenda de trabajo para beneficio mutuo.
Se trató de la última actividad con representantes
de países que ha llevado desde que inició su mandato el 1 de diciembre pasado.
De entonces a la fecha ha celebrado múltiples reuniones y actividades con
gobiernos extranjeros para atraer inversiones, aprender de ellos y fortalecer
la presencia de Coahuila en el mundo.
Desde mi punto de vista las reuniones más destacadas han sido las siguientes y las enlisto en orden de importancia:
1. Gobernador de Texas en Austin. Se trató de una intensa gira de trabajo celebrada en agosto por el estado con el cual Coahuila tiene profundos lazos económicos, históricos y sociales. Luego de EE.UU. en su conjunto, Texas es nuestro segundo socio comercial.
2. Reunión en mayo con Ken Salazar, Embajador de EE.UU. y reuniones posteriores con el cónsul en Monterrey. El 92% de los 60,000 mil millones de dólares que anualmente exporta Coahuila van para EE.UU., por lo que se trata de un socio más que estratégico. De hecho EE.UU. es mucho más importante que 30 estados de México, haciendo a un lado Nuevo León y Durango.
3. Reunión con el Embajador de España, citada al inicio y con quien tenemos una relación cultural y económica algo importante, destacando que Aguas de Barcelona y el gobierno municipal de Saltillo son socios en Aguas de Saltillo, quizá el organismo operador de sistema de agua más eficiente y efectivo del país.
4. Reunión en junio con embajadores de la Unión Europea en Ciudad de México, países con los cuales Coahuila puede y debe reforzar sus relaciones comerciales. Precisamente para eso fue dicha reunión.
5. Visita a China en abril. Guste o no sus inversiones son importantes y aquí un dato: el 18% de las importaciones de Coahuila provienen de ese país. Aquí el reto para Coahuila es andarse con mucho cuidado. Cualquier empresa china significa presencia del gobierno chino en tu territorio, dado que en la práctica le pertenecen. Además, siendo Coahuila estado fronterizo con EE.UU. no se puede pecar de ingenuo. El estado no puede perder de vista la geopolítica mundial; EE.UU. y China están enfrascados en una lucha por la supremacía mundial.
Se trata entonces de cinco reuniones internacionales celebradas a la fecha y de mucho peso en menos de un año como gobernador. Seguramente están en la agenda visitas o reuniones con embajadores de otros países importantes para Coahuila como Canadá, Japón, Corea del Sur y Alemania, los cuatro con fuertes inversiones en el estado.
Como coahuilense celebro el activismo internacional de Coahuila a través de su gobernador. Los estados deben valerse por sí mismos hasta donde la camisa de fuerza del “federalismo mexicano” lo permita y el tema internacional no es una excepción. Más cuando se tiene en el gobierno “federal” al régimen más centralista desde el porfiriato y al cuál hace más caso a Venezuela o Nicaragua, que a países democráticos.
Por cierto, Coahuila tiene mínimas relaciones comerciales con Latinoamérica. De esta región, Brasil es con quien más comercia, representando apenas el 1.6% de sus compras internacionales.
Luego de todas las reuniones internacionales hasta ahora celebradas y de las que faltan, sigue ahora lo más difícil: aterrizarlas. Será entonces cuando podremos confirmar que sirvieron para algo, y más vale que así sea dado el futuro incierto del país.
Pero la pregunta central es ¿hay un propósito adicional en estas reuniones del gobernador coahuilense con los representantes de otros países más allá de los comunes de fortalecer la relación comercial, económica y cultural? Es posible y en el tiempo lo sabremos.
Concluyo está columna rescatando una anécdota en la reunión celebrada en Saltillo del gobernador con el cónsul de EE.UU. en Monterrey. En su intervención el gobernador dejó entrever, palabras más o palabras menos, que los coahuilenses no debiéramos tener visa para cruzar al otro lado. Ello causó sorpresa y generó hasta sonrisas nerviosas entre los visitantes.
Lo cierto es que, para lograr algún día eso de cruzar sin visa a EE.UU., y que se ve ahora imposible por múltiples factores, Coahuila debe tomar pasos firmes, radicales y sostenidos. El gobernador sabe cuáles son. En mi opinión hay que comenzar a darlos, no por la visa como un fin, sino por el futuro del estado.
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